¿Qué es el ozono?
El ozono es un gas compuesto por tres átomos de oxígeno, de un olor característico que nos recuerda al del cloro y coloración azulada.
El ozono se crea de forma natural en la atmósfera mediante la interacción del oxígeno del aire bien sea con los rayos durante las tormentas, como también con su interacción con las radiaciones ultravioleta emitidas por el sol.
Generación artificial
La generación artificial de ozono se realiza habitualmente mediante el denominado “efecto corona”, que consiste en hacer pasar oxígeno entre dos electrodos separados por un material dieléctrico y sometidos a una gran diferencia de potencial, creando descargas controladas.
Oxidación
El ozono es un desinfectante natural altamente inestable que, tras reaccionar, vuelve a su estado original como oxígeno. Gracias a su gran poder oxidante reacciona instantáneamente con muchos contaminantes químicos del aire, algunos de ellos responsables de olores, y con cualquier microorganismo presente en el aire y superficies.
Ventajas
· El ozono es el oxidante más efectivo para aire, agua y superficies.
· Elimina o inactiva patógenos (bacterias, virus, hongos, mohos, esporas…) en segundos mientras otros oxidantes tardan minutos, siendo en algunos casos incapaces de eliminarlos.
· No genera residuos porque tiene un tiempo de vida corto por ser muy inestable, reconvirtiéndose en oxígeno tras reaccionar.
· Se genera in situ para su aplicación, a diferencia del hipoclorito (lejía), y de otros químicos que debe ser almacenado, entrañando un riesgo.
· Muy bajo consumo eléctrico.
Aplicaciones ambientales
· Habitaciones de hoteles
· Baños y vestuarios
· Vehículos
· Residencias de ancianos
· Guarderías y colegios
· Hospitales y clínicas dentales, veterinarias, estéticas…
· Gimnasios, centros deportivos y de baile
· Cocinas, comedores, cuartos de basuras en hostelería
· Bingos, casinos y salones de juego
· Oficinas…
